Una propuesta de Maxi Rossini, que es un impulso para compartir en un espacio común sus dibujos de tejidos, flores y jarrones con una serie de obras desconocidas hasta el momento de su coterránea Fabiana Imola.
La primera de las tres muestras que se agendaron en La Alianza en el marco del Programa de Exposiciones para artistas y curadores que lleva adelante la Secretaría de Cultura y Educación de la Municipalidad de Rosario. La curaduría está a cargo de Ángeles Ascúa y musicaliza Emiliana Arias.
La serie de obras de Fabiana Imola a la que apunta Maxi Rossini, se trata de una producción temprana de la autora, confeccionada con bouquets de flores disecadas y semillas que conjuga en diversas superficies. Estas piezas no se exhiben desde su creación en los años noventa. No fueron tenidas en cuenta para la retrospectiva “Enramada” que se realizó en el Museo Castagnino en el año 2016.
En 1998 Rossini comienza su trayecto universitario en Bellas Artes, coincidentemente el mismo año que estas obras fueron concretadas. El “motivo” de esta exhibición es echar luz sobre este periodo como asimismo revelar los intereses de ambos autores; una flora, un pedazo de ecosistema, también una muestra de amor.
Inaugura: jueves 16 de mayo a las 19:00 hs.
Alianza Francesa Rosario San Luis 846
La muestra se podrá visitar de forma gratuita hasta el 14 de junio, de lunes a viernes de 9 a 12 hs y de 16 a 21 hs. Sábados de 9 a 13 hs.
Rossini señala que en 1998 llegó a Rosario para estudiar Bellas Artes, «coincidente con la época en la que Fabi gestaba y producía estas obras, pero deberían pasar algunos años más para conocernos personalmente en El Levante (creo que en el 2003 o 2004). Fabi me contó que había trabajado y armado una muestra alguna vez con bouquets de flores, no profundizamos en la cuestión y la anécdota quedo ahí, dispuesta para que yo tratara de completarla».
«¿Esos ramos eran flores frescas en forma de bouquets dispuestos en el espacio de exhibición? ¿Eran flores secas? ¿Se iban secando en el tiempo que duraba la muestra?, deberían pasar varios años más para que me decidiera a volver a indagar sobre la cuestión, y para mi sorpresa muchos de esos bouquets aun existían, tenían forma y estaban guardados en el fondo de su taller»
Texto curatorial de Ángeles Ascúa (fragmento)
Nuestra exposición podría ser nombrada dentro de los múltiples epítetos que los teóricos del arte le otorgaron a este tipo de procedimientos, sin embargo ninguno de ellos da cuenta de la operación. Porque más que tratarse de una operación, ésta es una muestra de amor.
Maxi Rossini (Leones, 1978) dice que su coterránea Fabiana Imola (Rosario, 1967) le había contado una vez de una obra que había realizado en los años noventa con flores frescas otras disecadas, también semillas. Esas obras no fueron exhibidas más allá de una ocasión en 1995, sobre las que Guillermo Fantoni testifica: “(…) en una pequeña habitación rodeada de ventanales, se exhibía una impactante composición floral erguida sobre una columna de acrílico transparente y desarrollada delante de un plano inclinado de tul —una tela que con su textura blanquecina tamizaba las luces de la sala y velaba a la mirada la arquitectura del fondo—. De esta manera, la escultura de exóticas flores rojas y sugestivos follajes, resultaba no sólo insólita en el contexto de la plástica de la época sino premonitoria considerando las realizaciones posteriores de la artista.”
A pesar de las múltiples reuniones que cobijaron a Imola y a Rossini entre bailes, río abierto, bagna caudas y desfiles; Maxi nunca había tenido la oportunidad de ver en vivo esas experiencias tempranas de la autora que luego se reformularían en el imaginario silvestre que caracteriza su obra hasta la actualidad. Maxi evocó por mucho tiempo esos arreglos en popurrí de Fabiana que hoy comparte con nosotros en esta exposición. Pretende iluminar dicha sección oculta de su referente para mostrarla junto a su obra, tejerla y enramarla.
Esas imágenes se emparentan con las piezas de su autoría comprendidas en la serie “Dibujo para no extrañar” cuyos motivos son similares. Estos dibujos retratan motivos florales realizados en papel de alta calidad con marcadores rotring o lápices duros. Se caracterizan por la minuciosidad de la labor, saturados de detalles y elegancia. Son flores esbeltas de una raza imaginada reunidas en ramos enormes engarzados en pequeños floreros desproporcionados.
Programa de Exposiciones para artistas y curadores
La muestra se realiza en el marco del Programa de Exposiciones para artistas y curadores, una iniciativa que la municipalidad impulsa a través de la Secretaría de Cultura y Educación, destinada a artistas o grupos de artistas y curadores o equipos de curadores de Rosario para llevar adelante muestras individuales o colectivas en la sala de exposiciones de la Alianza Francesa de Rosario, con el objetivo de habilitar espacios de exhibición en la ciudad e incentivar el desarrollo de proyectos expositivos.
La producción y el seguimiento de proyectos los hacen Mauro Guzmán y Gabriela Gabelich, para Secretaría de Cultura y Educación.
Alianza Francesa Rosario – San Luis 846